IGLESIAS MIEMBRO DE LA FEDERACIÓN LUTERANA MUNDIAL EN AMERICA LATINA Y EL CARIBE
CONFERENCIA DE LIDERAZGO
BUENOS AIRES, ARGENTINA, 30 DE MAYO AL 3 DE JUNIO 2011
Convocadas y convocados en la Conferencia de Liderazgo bajo el lema “Viviendo la comunión entre nuestras iglesias Luteranas y celebrando el compartir el pan con las/os Excluidas/os de nuestros pueblos”, las Iglesias miembros de la Federación Luterana Mundial de la región de América Latina y el Caribe reconocen el espíritu solidario y celebran la acogida y hospitalidad que nuestras iglesias hermanas, la Iglesia Evangélica Luterana Unida e Iglesia Evangélica del Río de la Plata nos han ofrecido.
Las iglesias miembro de la FLM en América Latina y Caribe hemos tomado conocimiento de las resoluciones aprobadas en la 11va Asamblea que tuvo lugar en Stuttgart, Alemania del 20 al 27 de julio del 2010 y del borrador del Plan Estratégico de la FLM. Recomendamos a su continuo estudio, meditación y puesta en práctica de las mismas.
De este estudio y animados/as por el lema que nos convoca recomendamos a nuestras iglesias a servir tomando en consideración la justicia de género como herramienta fundamental para promover igual participación de varones y mujeres en nuestras iglesias y sociedades. Somos conscientes del constante maltrato que muchas mujeres sufren provocado especialmente por la violencia intrafamiliar. Pese a la resistencia para enfrentar el tema en las diferentes realidades, consideramos de suma importancia el seguir trabajando en nuestras iglesias y sectores sociales en este tema. Proponemos promover y preparar programas en las iglesias, escuelas y grupos comunitarios que ayuden a la prevención, protección y acompañamiento a las víctimas que sufren este tipo de violencia. Instamos a derribar barreras que silencian el sufrimiento de las mujeres a fin de contribuir a nuestra sociedad con un ministerio liberador.
Como iglesias reconocemos que tanto varones y mujeres somos imagen de Dios y destacamos la participación de nuestras líderes en la conferencia. Manifestamos nuestro deseo de plasmar teologías de género desde las diferentes realidades latinoamericanas a fin de recuperar la producción teológica que se genera desde y para las mujeres. Alentamos a la creación de redes inter-generacionales y especialmente de mujeres, a fin de que nuestra misión de promover iglesias más inclusivas use la herramienta de justicia de género como fundamental para el crecimiento y promoción de relaciones de igualdad en derecho y participación. Aplaudimos el visibilizar a las mujeres y los/as jóvenes en el espacio de la Conferencia de Liderazgo. Sin embargo, motivamos a una mayor participación considerando equidad en cuanto aportes y la inclusión de mujeres y los/as jóvenes en la coordinación de los programas en la región.
La Deuda Ilegitima y la Crisis Financiera mundial, nos hace tomar una posición ante la realidad de injusticia e inequidad económica que golpea a nuestros pueblos. No podemos quedarnos callados/as ante el sufrimiento de miles de seres humanos que viven en condiciones inhumanas. La crisis financiera, resultado de malas políticas económicas, nos mueve a hacer un llamado para que toda la comunión luterana se involucre en el tema de deuda ilegítima y a proponer y apoyar auditorías de la deuda en los países de la región y de la comunión.
Afirmamos que el compartir el pan es un llamado que Dios hace a fin de celebrar juntos/as como hermanos/as en una misma mesa como símbolo de vivir y expresar nuestra fe. Reconocemos nuestros dones y ministerios e invitamos a promover diálogos ecuménicos. Entendemos que el ecumenismo nos llama a un diálogo sincero con quien es diferente para entender la misión de Dios y enriquecer nuestros puntos en común en el regalo de la diferencia. Un ejemplo se da en el emprendimiento expresado después del terremoto de Chile en 2010 pues la solidaridad y compromiso se concretizan al acompañar y servir a quien sufren dando testimonio a nuestra saludable convivencia en la diversidad.
Las iglesias vivimos en un mundo de constantes cambios y de contextos diversos que continuamente nos invitan a trabajar nuestra identidad eclesial. Las iglesias miembro de la FLM somos iglesias inclusivas y tratamos de promover el liderazgo y la ordenación de varones y mujeres en zonas rurales y urbanas considerando la diversidad de pensamiento, cultura, tradiciones, etc. Tanto el ministerio ordenado y laico, permeados por los cambios, nos llaman a armonizar la formación teológica con lo concretos desafíos de nuestras realidades. Reconociendo la necesidad por cambios en nuestras propias iglesias, hacemos un llamado para estar atentos/as a las necesidades en cuento formación teológica y responder a los desafíos contextuales integrales. En esta misma vía, un desafío para la iglesia es contar con herramientas para servir y acompañar a los pueblos indígenas que viven en situación de injusticia, empobrecimiento y desarraigos de sus tierras. Las iglesias presentes incidimos en la defensa de los derechos de los pueblos originarios e expresamos voluntad para servir a nuestro/a prójimo/a.
Frente a los cambios climáticos y a las situaciones de emergencia, las iglesias de la región consideran la necesidad de una continua capacitación a fin de crecer y desarrollar trabajos articulados en la prevención y respuesta a las emergencias. Otro aspecto que nos mueve en la misión de Dios son las poblaciones en situación de encarcelamiento, potencial actores en la diaconía profética. Llamamos a las iglesias de la región a ser interlocutoras frente a las autoridades civiles respecto de las problemáticas específicas de los y las personas encarceladas. Instamos a alianzas estratégicas con organizaciones envueltas en este trabajo a fin aunar esfuerzos en la tarea que las iglesias desarrollan.
Las iglesias miembro destacan la contribución de los y las jóvenes que han participado de forma activa en la conferencia. Los y las jóvenes han trabajado para hacer posible la creación de la Red Latinoamericana y Caribeñas de Jóvenes cumpliendo así con su propuesta de la Pre-Asamblea realizada en Bogotá, Colombia el 2010. Esta Red tiene el objetivo de posibilitar comunión, fortalecer relaciones y alianzas, mejora el intercambio de información y experiencias, y promover encuentros y capacitaciones regionales entre los y las jóvenes de las iglesias en la región. Para fortalecer aun más el movimiento juvenil, se hace un llamado a que las iglesias posibiliten espacios para que, como agentes de transformación, los y las jóvenes puedan aprender y compartir sus dones con y en la comunión.
Las iglesias miembros de la Federación Luterana Mundial en la región de América Latina y el Caribe hacen un llamado a la comunión entera a celebrar y compartir el pan con las/os excluidas/os de nuestros pueblos y a asumir el compromiso de seguir contribuyendo en la transformación de nuestras sociedades y promoviendo oportunidades para el ministerio profético de servicio y amor de nuestras iglesias.
Que Dios de vida, justicia y amor inunde nuestros corazones e ilumine nuestras mentes con la inspiración de la sabiduría divina y el actuar de Cristo Jesús.
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